martes, 5 de febrero de 2013

EN BUSCA DE UNA MUSA QUE ME ACOMPAÑE EN LA MESA

Cansado de esperar algo que nunca llegaba, decidí tomar yo las riendas, ya han pasado muchos años desde aquel ultimo verso que escribí, han pasado muchos años desde el ultimo beso que le di.

Mi musa era preciosa y me hacia la mejor de las compañías, su presencia era siempre agradable, una elegancia exquisita y un físico insuperable. Pechos firmes y muy voluminosos, un metro y setenta centímetros de esbelta talla, cada una de sus curvas eran capaz de construir con su contoneo una linea recta entre mis piernas, así era ella, sensualidad en cada paso, cada gesto, incluso al dormir también cuando roncaba.

Me inspiró cienes de escritos y cientos de poesías, hasta que un buen día, volviendo yo de una romería me encontré una note en la mesa que decía:

Cariño, me fui para no volver
no me busques, no me encontraras
¿te acuerdas de Blas?
lo siento, debes saber que te engañaba con él.

Besos, tu musa

Desde entonces soy un escritor sin prosa, un poeta sin poesía, y en mi mesa la silla de mi musa esta vacía.

por eso hoy vuelvo a recurrir a la jarana, al guateque y la fiesta para ver si entre botella y botella, entre vaso y vaso encuentro una musa que me acompañe en la mesa.


Gracias.

CANTÁNDOLE A LA LUNA CADA DIA

Pasó los días sentado en una silla de mimbre, su cuerpo era pálido y frío pero aunque no lo pareciera estaba lleno de vida.

Preguntan por él todos los días en la calle, nadie sabia nada, sus padres afirmaban que estaba en casa, bien, pero aun y así la gente piensa y opina cosas que no coinciden con la versión de la familia, que si esta ingresado en un loquero, que si se fue de casa y los padres no lo han superado, que si murió y no lo hicieron saber a nadie...

Cómo serán las cosas que cuando él se sentía más vivo que nunca, con más fuerzas para seguir adelante, la gente lo daba por loco o por muerto. Era totalmente cierto que llevaba ya varios meses sin ver la luz del sol y sin ver tampoco a sus vecinos. Pero no tenían derecho a darle por muerto, y menos ahora que se sentía lleno de vitalidad.

Se diferenciaba del resto porque el siempre hizo lo que le parecía más correcto y lo que a el más le apetecía hacer. Esta vez le dio por apartarse del día y de su gente, del estrés del movimiento, de lo que la gente conoce por vida. Sonaba muy raro pero le parecía perfecto, ahora vivía de noche y contemplaba el cielo y las estrellas, ademas era normal, a él siempre le había gustado pasar las horas cantándole a la luna llena, le recordaba su cabeza pelona por los tratamientos médicos más severos.

Así decidió acabar el resto de sus días, el resto de su vida la pasó cantándole a la luna cada día.



Gracias.

AL RITMO QUE MARCA EL GATILLO

Alzó su cuerpo del suelo, la explosión fue cercana, casi pudo sentir la metralla en la piel, estuvo a punto de alcanzarle, por suerte estaba a buen recaudo tras un coche civil.

Sacó de su bolsillo una fotografía, era de su mujer, la besó y le dijo: Cariño, pronto volveré a estar a tu lado con los niños.

Sólo tenía a su lado un puñado de soldados aliados y su arma, debían avanzar con mucho cuidado, eran pocos hombres y los refuerzos todavía tardarían en llegar.

Por su cabeza aun rondaba la idea de la retirada, era lo más lógico en aquel momento, estaban en clara desventaja, el enemigo contaba sus efectivos por cientos, ellos solo eran unas cuantas decenas, el armamento enemigo contaba con algunos lanza-granadas  artillería pesada, vehículos de guerra, mientras que ellos iban a pie y con sus armas de repetición  una pistola de mano, granadas y algún que otro cuchillo.

Estaba claro que si el enemigo decidía avanzar con fuerza, estarían perdidos.

Los refuerzos no llegan, los corazones de los soldados estaban cada vez mas alterados, el enemigo avanzaba lentamente, cada vez estaban mas cerca, se podían oír los disparos y los gritos cada vez más cerca, ya casi se podían distinguir las siluetas de los soldados.

Tras consultar por radio la posibilidad de la retirada se oyó clara y concisa la orden: ¡¡ NI RETIRADA NI RENDICIÓN!! Levanto en alto su mano derecha, haciendo un gesto para que le prestaran atención  en voz bien alta para que se enteraran todos los soldados que lo acompañaban dijo: ¡¡ABRID FUEGO!! Dispararon sin pensarlo, disparando a matar, estaban dispuestos y entrenados para morir matando. muchos de los disparos fueron certeros, empezaban a verse cuerpos caer al suelo, se alegraron, pese a la tristeza de la situación  aun no estaba todo hecho, sabían que estaban en inferioridad así que decidieron lanzar algunos explosivos para tratar de debilitar en mayor medida al pelotón enemigo que se le estaba a punto de abalanzar  ya a menos de cien metros.

Los corazones latían alterados, incluido el suyo, aun estando entrenados para no ponerse nervioso ante este tipo de situaciones, su corazón latía al ritmo que marcaba el gatillo, hasta aquel momento todo estaba bien, el enemigo iba perdiendo efectivos tras cada disparo. Una bala enemiga perdida avanzaba silbando por el aire, cruzo entre dos soldados aliados, se asustaron les paso cerca del oído  pero más se asustaron cuando escucharon el grito ahogado de su superior, la bala le había impactado de lleno en el cuello, le seccionó una arteria, le era imposible respirar y en ese mismo instante, sin aire ya, dejando de sentir, dejando de padece empezó a notar como su corazón dejaba de latir al ritmo que marca el gatillo.



Gracias.

lunes, 4 de febrero de 2013

VIAJE AL CENTRO DE LA TIERRA

Le puse alas a mi alma y la eché a volar, estuvo un largo tiempo desaparecida, con mi consentimiento, me convertí durante todo ese tiempo en un tipo desalmado, un miserable, un despreciable ser.

Un día mi alma decidió volver a mi, la curiosidad me comía así que le pregunte por como le había ido, que había estado haciendo y me respondió con total sinceridad: -He disfrutado muchísimo fuera de la prisión de tu cuerpo, he viajado y he aprendido muchísimo.

Me contó que había estado en Egipto  de allí me explicó la grandeza de las pirámides y como estas fueron construidas piedra a piedra por los esclavos con sus propias manos. También estuvo en Nueva York, de allí me contó que el nivel de estrés es muy elevado, al igual que en todas las grandes ciudades que había visitado en todos y cada uno de los continentes. También estuvo visitando pueblos y poblados pequeños por toda Asia, y de todos ellos me contó que allí prima la humildad y el respeto, algo que deberíamos aprender de su cultura... Me contó que había visitado los Emiratos Árabes  y Dubai entre otras ciudades, las riquezas de aquellas tierras son exuberantes  pero con el ritmo de vida que llevan, les va durar muy poquito. Sobre mamá África me estuvo contando que su belleza es inmensa, son paisajes espectaculares, dignos de visitar y ademas de admirar, pueblos sin recursos gente totalmente pobre pero que no escatiman a la hora de regalar sonrisas, el gesto más bonito y caro del mundo dibujado en las caras de todos los niños y no tan niños, de oreja a oreja. De centro y Sudamérica me explico más bien poco, viven tranquilos, relajados y sin prisa, pero con el sueño americano pueden llegar a ser avariciosos y eso no es nada bueno.

Pero lo que más ilusión me hizo que me contase fue que a pesar de haber visto el mundo y todos sus continentes, surcar sus cielos y sus mares, ver cada pueblo y cada ciudad, no hay nada mejor que estar en casa con los que, a pesar de no recordartelo a cada segundo, más te quieren y más te respetan. Esa es la mejor sensación, tu casa y tu gente.



Gracias.