lunes, 17 de diciembre de 2012

LOS ERRORES LOS COMETO POR DEFECTO

Estirado en la cama veo pasar las horas, pensando que el tiempo se escapa y que ya no se puede hacer nada, espero impaciente que suene mi teléfono, espero poder decir lo que siempre he sentido, algo así como..:
- Buenos días princesa, me estoy quedando afónico por susurrar tu nombre en la noche, si, es cierto, no detuve el tiempo y lo derroché, ya es tarde, no es la hora de volver. ¿Porque no podemos volver a volver a volver? Se que nada es para siempre, pero nunca quise quedarme en la tierra tanto tiempo, si, sabemos los dos que yo soy como el viento y que si puedo no me detengo, ¿pero que mas da el infinito? si lo que sabemos que puede terminar siempre se convierte en algo mas bonito. Se que ya no me escuchas, y que no lees lo que te escribo, pero aun me queda el consuelo de saber que lo que pudo ser y no ha sido, pudo haber sido vivido. Vale, esta bien, tu haz tu vida, princesa, que yo ya mal haré la mía..  Pero si no te tratan como debes, princesa, recuerda que: tu eres la que más vales y que por encima de todo estas tu y por encima de ti, también tu, no lo olvides! Un beso princesa, y  aunque no te lo demuestre y aunque tanto tiempo ha pasado, que sepas que aun te quiero.
Pero el maldito teléfono no suena y estas frases siguen siendo parte de mi particular condena. ¿Porque siempre me toca equivocarme?, ¿porque no seré capaz de centrarme de mirar lo que tengo y no arriesgarme a perderle?
Soy un cabezota, es cierto, y los errores los cometo por defecto

No hay comentarios:

Publicar un comentario